Si tengo que hacer una recapitulación de este año diré que he aprendido mucho. He aprendido a coger aviones como quien come pipas, a estar sola día tras día, a ser valiente y fuerte y a tener confianza. He aprendido que hay mucha gente que no merece la pena y que sólo una poca lo merece. He aprendido a sobrevivir, a ser yo misma y a luchar por lo mío. He aprendido que soy bastante casera, que echo de menos a mi familia y que suelo necesitar, como mínimo, un abrazo al día.
Me he cruzado con demasiada gente que no ha valido la pena, que no me han aportado nada, espero que de ahora en adelante, también me tope con gente que sí que valdrá la pena.
Pero estoy orgullosa de mí porque he sido capaz de llegar hasta el final y aunque me he derrumbado, llorado y demases, nunca me he rendido y ahora puedo decir que todo saldrá bien. Que poco a poco voy labrando mi camino y que estoy feliz. Soy feliz. Ha sido un gran año que me ha hecho madurar a base de golpes, pero todo ha sido por algo.
Barcelona es una ciudad preciosa, tiene su encanto y desde luego, hay gente para todo. Espero volver algún día y verla del mismo modo que la veo hoy en día.
Me alegro de haber vivido todo esto.
GRACIAS.